Precalienta el horno a 200ºC. Pon una olla a calentar a fuego medio. Corta el tofu en dados grandes de unos 4cm. Lava y corta el calabacín en rodajas no muy gruesas.

En un bol, añade el calabacín y los dados de tofu, dos cucharadas de aceite de oliva, dos tercios del ras el hanout, una pizca de sal y pimienta. Mezcla todo para que se queden los trozos bien impregnados de las especias.

Inserta los trozos de calabacín y tofu especiados en las brochetas, de forma alterna. Coloca las brochetas en una bandeja de horno utilizando papel de horno o papel de aluminio para ensuciar lo menos posible. Introduce la bandeja en el horno 10-12 minutos o hasta que el pollo esté cocinado.

Cuando el agua rompa a hervir, añade el bulgur y deja cocinar 10 minutos. Después, escurre y reserva.

Mientras se cocina el bulgur, pon una sartén a calentar a fuego medio con un chorrito de aceite de oliva. Pela y pica finamente el ajo y pela y corta la cebolla en juliana fina (tiras). Añade la cebolla y el ajo a la sartén, salpimenta y cocina 5-6 minutos. Cuando queden dos minutos añade las almendras a la sartén y tuéstalas.

Añade a la sartén el bulgur, previamente escurrido, el resto de ras el hanout, la miel y sazona al gusto. Mezcla todo y retira del fuego. Sirve tu plato con el bulgur y las brochetas. Mezcla el tofu y el calabacín con el bulgur ¡A disfrutar!