Pon el horno a calentar a 200ºC.
Pela y corta el boniato en dados pequeños.
Colócalos en una bandeja de horno, rocíalos con un chorrito de aceite de oliva y dale un toque de sal y pimienta.
Introduce la bandeja en el horno durante 20-25 minutos o hasta que estén tiernos y dorados.

Pela y pica la cebolla en juliana (tiras).
Retira los tallos del cilantro y pica sus hojas.
Pela y pica el ajo en dados muy pequeños.
Ralla la cáscara de la lima y córtala en dos mitades.
Lava con agua fría y escurre los garbanzos.

Calienta un chorrito de aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Cuando esté caliente, añade la cebolla junto con una pizca de sal y cocina durante 3-4 minutos. Después, agrega el ajo picado, los garbanzos cocidos, otro toque de sal y pimienta y cocina 3-4 minutos más.

Saca el boniato del horno. ¡Ha llegado su turno!
Añádelo a la sartén junto con la miel, el comino y el jugo de una mitad de la lima exprimido con tus manos y deja cocinar 2 minutos más.

Parte el aguacate a la mitad. Pela y corta una de las dos mitades en rodajas finas y reserva. Pela y pica la otra mitad en dados muy pequeños y añádelos a un bol. Incorpora al bol el yogur griego, el jugo de la otra mitad de la lima al gusto y su ralladura. Remueve y machaca todo con un tenedor hasta tener una mezcla homogénea. Condimenta con sal y pimienta al gusto.

Extiende la crema de aguacate sobre las hojas de lechuga. Añade el relleno, las rodajas de aguacate y el cilantro picado al gusto. ¡Listo!