Solomillo Wellington

A pesar de su nombre y de las leyendas gastronómicas, el Solomillo Wellington no tiene nada que ver con Arthur Wellesley, Duque de Wellington, pero sí con la tradición europea de asar carnes en una costra de masa para que resultaran más tiernas. Según se adaptaba la receta original al ámbito doméstico, el Wellington fue perdiendo por el camino varios de sus elementos más prohibitivos (trufas, froie gras fresco) para sustituirlos con alternativas más asequibles como el jamón, el paté o las setas.

Patata, Solomillo de cerdo, Masa de hojaldre, Champiñón Portobello, Cebolla, Paté, Queso de cabra (Leche pasteurizada de cabra, sal, cuajo, cloruro cálcico, fermentos lácticos y Penicilium.), Huevos camperos, Panela

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Ingredientes

Solomillo de cerdo

Masa de hojaldre

Queso de cabra

Champiñón Portobello

Paté

Cebolla

Panela

Huevos camperos

Patata

Utensilios

Consejos antes de comenzar

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Paso a Paso

1 EMPEZAMOS

Enciende el horno a 200º. Para preparar este clásico primero saca el hojaldre y deja que se atempere. Coloca una sartén a fuego medio-bajo con un chorrito de aceite Mientras tanto, pela y corta la cebolla en juliana.

2 CARAMELIZA

Una vez caliente añade la cebolla a la sartén y pocha a fuego lento para que caramelice unos 5-6 minutos. Lava bien y corta las patatas en gajos, al estilo patatas deluxe. Llegados a este punto, añade la panela para añadir un plus de dulzor y dora un par de minutos más, retira del fuego y reserva.

3 MARCA

Es momento de dorar al protagonista de nuestro plato. Vuelve a colocar la sartén a fuego medio-alto. Salpimenta el solomillo por todos los lados. Marca el solomillo por todos sus lados hasta que adquiera un color tostado, recuerda que luego va al horno, que no esté más de 1 minuto por lado. Si te gusta muy hecho puedes tenerlo más tiempo.

4 LA MEJOR PARTE

Coloca las patatas en una bandeja de horno, con papel vegetal para no ensuciar y dejando hueco para el solomillo. Rocia con aceite e introduce en el horno en la parte media-baja. Desenrolla el hojaldre sobre su propio papel. Tiene que cubrir el solomillo entero así que si crees que necesitas más hojaldre puedes estirarlo un poco con un rodillo o con tus manos. En el centro del hojaldre coloca el queso de cabra y justo encima la cebolla caramelizada

5 CASI CASI

Ahora con cuidado coloca el paté intentando extenderlo sin mover mucho la cebolla. Para ello recomendamos que saques el paté entero del tarro, vayas cortando láminas y colocando sobre la cama de cebolla. Una vez tengas el paté, corona con el solomillo.

6 ENROLLA

Si quieres ir para nota, y te sobra hojaldre, corta unas pequeñas tiras para luego decorar la parte superior del solomillo. Sino, pliega los extremos del solomillo con el hojaldre y luego enrolla el resto. Es importante que quede bien sellado. Cuando lo tengas dale la vuelta, añade las tiras decorativas si las has dejado, bate el huevo y píntalo con una brocha de cocina o con una cucharilla. Por último, coloca el solomillo en la bandeja con las patatas y hornea unos 20 minutos hasta que adquiera un color tostado. SI te gusta más hecho puedes dejarlo algo más de tiempo.